Las
estrategias de los funcionarios de la
UGEL de Padre Abad encabezados por Eddy Ramón Sipión Cajusol para continuar en
los cargos se basa en la criollada, en las mentiras y otras argucias que solo
puede convencer y sorprender a gente que desconoce el sector y la realidad
educativa y administrativa de la provincia de Padre Abad, siendo ellos las
autoridades y el mismo gobernador regional. Pero no, para nada, a los que
vivimos de cerca, a los que recibimos continuamente las denuncias verbales y
documentadas. No puede convencer a aquellos maestros que han sufrido esos
atropellos y abusos, esos padres de familia que han sido maltratados
verbalmente. La gente que vive en Aguaytía, quienes son testigos de las quejas
continuas y contundentes. Efecto del cual recibe el rechazo y ha convertido el
ambiente en tirante con sus múltiples irregularidades.
Los
docentes que acatan la medida de fuerza nacional en la provincia de Padre Abad,
exigen la salida de este señor, con ese propósito se dio la reunión en el despacho
de la alcaldía. Ahí al alcalde y al consejero Wilson Pinedo se les describió
punto por punto los malos actos, paso por paso la serie de faltas de Sipión. El
alcalde en respuesta argumentó que desconocía los casos y se comprometió hacer
suyo el reclamo y solicitar audiencia con Gambini el primero de junio para
solucionar el asunto. Ya en esa reunión con el alcalde, Sipión esgrimía su
defensa plagado de mentiras, el cual se le rechazó estrepitosamente todos
aquellos que conocemos sus fechorías.
Los
docentes esperaban la llegada de ese momento de la conversación con Gambini, el
cual no se dio como debe ser, dado a que ese día, el 01 de junio, el gobernador
solo tenía en mente pasarla bien en
Aguaytía y nadie le advirtió de ningún problema y de ninguna necesidad de
diálogo. Hasta que los maestros le abordaron en el trayecto, al ingreso del local
de la piscina de Sally, para exigirle que haga justicia, que resuelva las
demandas, quejas y reclamaciones en contra de su colaborador y predilecto
Sipión. Los maestros perdieron el tino porque sentían que las autoridades
locales que se comprometieron les fallaron. Entonces arengaron en contra de su predilecto y le
exigieron a Gambini que haga los cambios. Este acto lo veníamos advirtiendo, aunque
no fue como lo que en otra oportunidad se le hizo al corrupto Portocarrero.
Cabe
recordar que, en la segunda ocasión que nos reunimos en Pucallpa con Gambini,
le dijimos: “Sr. Gambini, vaya Ud. a
Aguaytía a constatar las denuncias in situ, no esperes que la gente se abalance
sobre Ud”. Eso de abalanzarse no se dio pero estuvo a punto. Es ahí justamente sorprendido
y perturbado él se comprometió absolver en esta semana.
No
obstante, nos sorprendió la actitud de Gambini en la reunión de hoy en la
ciudad de Pucallpa. Cuando los dirigentes pensábamos que ya tenía una posición
clara con respecto al cargo del director de la UGEL de Padre Abad, toda vez que,
se le hizo llegar el conjunto de documentos que le condenan a su predilecto
Sipión, se mostró dudoso e indeciso, dejando entrever que Sipión estaba siendo víctima de personas a quienes él
les exigía logros y trabajo.
Entonces
nos dimos cuenta que Gambini le cree más a su gente, a los de su cúpula y a la
mentira; pero a la masa magisterial, al pueblo y a la verdad no. Le cree a su predilecto,
fanfarrón y mentiroso colaborador de la Ugel de Padre Abad. Ahí nos convencimos
que Gambini demuestra que no tiene tacto, que tiene poca capacidad ejecutiva y no
toma las decisiones oportunamente. ¿Ingenuidad y/o complicidad? A una de estas
dos hipótesis lo confirmará o descartará la comisión que tiene el carácter de vinculante. Nos atrevemos
a afirmar que la comisión fallará a favor de la verdad y castigará al
mentiroso. Esta conclusión ratificará, una vez más, a nuestra afirmación.
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