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lunes, 27 de abril de 2015

EL PUEBLO Y EL GOBIERNO DEBEN DESAPARECER AL CORAH (Escribe Ing. Winger F. Rojas)

1.- Generalidades:
CORAH, es un Proyecto creado por DS N° 043-82 durante el gobierno de Belaunde, en la cartera de Agricultura, como respuesta a la presión de EEUU por el incremento de cocales ilegales en el alto Huallaga durante el boom del narcotráfico en los 70s y 80 conllevado por los carteles de narcotraficantes Colombianos, que sacaban droga del Perú (PBC), lo refinaban en Colombia (Cocaína) y de ese País enviaban a los EEUU. Acotamos que CORAH fue creado por el pedido del Gobierno Americano, que no tuvieron mejor idea que digitar una organización peruano que ataque el “eslabón más débil” de la cadena del narcotráfico, “los cultivos de coca”, tan fuerte era la presión Americana que el apoyo económico que USA brindaba al Perú para cualquier programa social o de desarrollo de los 80, que de por si eran ayudas “míseras” y sin resultados como parte de su política exterior a través USAID, BID y otros direccionados por EEUU, estaban condicionadas a la erradicación de cultivos de coca y a la lucha contra el narcotráfico, fácil para ellos, porque USA al tener una sociedad consumista, la mayoría de sus jóvenes descontrolados por la falta de valores, y con buena economía, estaban expuestos a las drogas y calificaron esta problemática como un peligro inminente para su sociedad y seguridad interna. Con el alto incremento del consumo de drogas alucinógenas, USA empezó gastando billones de dólares, para rehabilitar a gran parte de su juventud inmersa en la drogadicción, implemento programas antidrogas, repotenciando la DEA, en su propio país y fuera de ellos, ejecuto programas de interdicción en otros países; paralelo a esto USA inicio una feroz presión a nivel mundial hasta conseguir incluir a la hoja de coca como droga en la ONU en 1961 y también en 1985, usando artimañas diplomáticas, políticas y procesos en laboratorios inadecuados de esas épocas y que es necesario que Perú y Bolivia, vuelvan a replantear o pedir métodos más científicos actualizados a la fecha para determinar la presencia de cocaína que solo representa el 1 % en la hoja de coca; frente a más de 200 otras sustancias no alucinógenas, beneficiosas al hombre; por ende los Norteamericanos mangonearon este proceso para “abolir la chaccha” en nuestros pueblos sin considerar el uso ancestral de su consumo, el acervo milenario cultural de nuestros antepasados, solo buscaban considerarlo ilegal y lo lograron frente a la inercia e ignorancia de los demás países miembros de la ONU y avasallar con la erradicación.
En su política antidroga EEUU tanto interna o externa desde los 80 hasta la fecha, no tuvo buenos resultados, era un fracaso y para solucionar sus problemas en todo este proceso echaron la culpa a los productores de coca de nuestro país así de fácil! Así de simple!! Ante esto... que culpa tenían los productores de coca, de la descuidada juventud Americana, que consumía cocaína y sus derivados? En la actualidad la drogadicción Americana, amplió su consumo a otra gama de drogas alucinógenas más letales como las anfetaminas, metanfetaminas, opiáceas, marihuana, etc. Y está perdiendo la batalla.
El agricultor de la selva, abandonado por las pésimas políticas agraria del gobierno Peruano no tenía ingresos rentables por su producción de plátano, café, cacao y otros productos agropecuarios y estaban condenados a vivir en la extrema pobreza... sus Ilusiones de tener más dinero para la familia eran válidas. Un Agricultor cocalero, no es narcotraficante. Se vuelve narcotraficante si transforma la hoja de coca en PBC o sus derivados y son pocos. Si hay narcotráfico es problema del descuido de la policía, la corrupción y pésima política social del gobierno. No vamos hablar de los problemas causados al medio ambiente, por las ingentes cultivos de coca y actitudes irresponsables y reprochables del narcotráfico y sus secuelas al destruir mucha flora, fauna y desbroce de áreas forestales o agrícolas y que esta destruya sociedades o que el narcotráfico genere violencia y delincuencia, porque en el fondo es también por el descuido de los gobiernos sucesivos que no tuvieron políticas agrarias especificas o sociales en favor de los campesinos para controlar, erradicar y cambiar la coca por una agricultura sostenida, concertada, sustentable, con valor agregado para la exportación, mas aunada a la ineficiencia policial en la lucha contra el tráfico de estupefacientes la corrupción enquistada en todas las esferas del gobierno por el narcotráfico o del terrorismo que protege el narcotráfico, por ser su fuente de financiamiento. De eso no hablamos ahora!!
Hablamos de las políticas erróneas, técnicas ilegales para establecer al CORAH, como organismo de represión en la erradicación de cocales y cuyas políticas no contribuyeron a la obtención de resultados y muy por el contrario mantienen una política represiva y anti técnica como un ciclo constante generador de problemática social.
2.- Análisis Situacional:
El CORAH no debe irse señores, el CORAH, debe desaparecer porque es una política impuesta por el gobierno americano, funciona a través de Convenios anuales suscrito entre la Cancillería Peruana y la Secretaria de Estado de los EEUU como acuerdo bilateral en la lucha contra las drogas, donde fijan un monto anual y la meta a erradicar, el CORAH está adscrita al ministerio del interior a través de la Oficina Ejecutiva del Control de Drogas (OFECOD), quienes dirigen el accionar del CORAH, no son sus directivos, ni DEVIDA, con el cual solo tienen relación tangencial, ese cuento es para el periodismo y la Opinión pública, sino los asesores que en su mayoría son exmilitares Americanos preparad solo para la guerra, sin mayor formación académica para políticas de desarrollo y que digitan el trabajo de erradicación, el presupuesto, como gastar, sus prioridades de seguridad y ganan un promedio de 12 mil dólares mensuales, (del dinero del convenio) libres de impuestos, el CORAH depende económicamente y rinde cuentas del gasto de su fondo mensual-rotatorio a la Narcotics Affaire Section (NAS), del departamento de Estado de los EEUU con oficina en la embajada Americana en Lima, El Director Ejecutivo del CORAH, el General (r) Juan Zarate Gambini, esta 8 años en el cargo y se supone que es un cargo de confianza de cada gobierno, debería ser removido en función de las políticas del gobierno Peruano, en cada cambio de Ministro del Interior, pero no.. esta Impuesto por USA y gana un promedio de 8,000 dólares USA mensual, más elevados viáticos y bonos, El Sr. Santiago Trujillo León que es el Director de Administración está trabajando por 31 años con un sueldo promedio de 6 mil dólares mensuales, el Ing. Miguel Ramos Hernández, Director de Operaciones con más de 30 años en el CORAH gana un promedio de 6 mil dólares mensuales, más viáticos, bonos y premios, El lng. Hugo Robles Jiménez, Director de Infraestructura con más de 25 años en el CORAH gana 6 mil dólares al mes; la Sra. Nora Conde, Directora de Logística, trabaja más de 33 años con más de 3000 dólares de sueldo mensual, y así otros ejecutivos, enquistados, parasitando, gracias al aval de los americanos, solo son títeres de la política de erradicación de coca de EEUU porque defienden sus sueldos, su jubilación millonaria, y los trabajadores de campo de CORAH, que laboran ahí ganan poco más de soles diarios...la mayoría sin estabilidad laboral no es una vergüenza?. Estos Directivos solo buscan artimañas groseras para seguir trabajando en la erradicación de los cocales y cumplir sus metas y no en función del Estado Peruano sino a disposición que emana del gobierno americano.
3.- Justificación:
El CORAH debe desaparecer porque su creación obedece a la Injerencia de un gobierno extranjero (USA). No participa ningún representante cocalero, o técnicos especializados en el área en la negociación del convenio marco entre el estado peruano y los EEUU.
Porque la erradicación de los cocales no obedece a un plan concertado con programas de sustitución es represivo, indolente, antisocial e inconstitucional, Porque no obedece a criterios técnicos legales que favorezcan a la masa agro cocalera, por ejemplo amplio su cobertura que inicialmente era solo el Alto Huallaga, a través de una resolución ministerial de la cartera del Interior sin pasar por un consejo de ministros, es decir sin Política de gobierno. El CORAH, tiene más de 33 años y seguimos siendo el primer productor de coca en el mundo y por ende de la cocaína, por qué mantener esta misma política errada? Y sabemos que todo es voluntad política para enmendar lo que se mantiene mal a través de los años. Tampoco estamos a favor de la cocalización ilegal del País, porque sabemos el daño colateral que causa. Para nadie es un secreto que el CORAH infla las hectáreas que erradica, y la erradicación de almácigos esta determinados por Supuestas hectáreas establecidas definitivamente, quienes lo permiten esto? no hay ente fiscalizador, por lo tanto los informes de sus, metas anuales solo son referenciales para callar a la opinión pública y usados políticamente. Ahora mismo hay más de 60 mil has de coca en todo en Perú. Si el CORAH erradica 30 mil has al año. En 2 años no habría coca.. Nadie puede creer esta mentira, Y son 33 años de mentira en la política de erradicación impuesta por EEUU, este país gasta más de 100 mil millones de dólares, en su país para controlar el consumo de drogas por ende como contraparte consumidor su aporte a la erradicación y a los programas de sustitución debería ser más onerosa tal como lo hace en Colombia y Centroamérica.
4.- Solución:
El CORAH, debe desaparecer y dar lugar a otro organismo adscrito al sector agricultura, que erradique, concertadamente y en función del crecimiento agroeconómico de los campesinos en los valles cocaleros dirigido por profesionales y técnicos conocedores de la problemática agro cocalera, separando el problema del narcotráfico que es un problema netamente policial y en Sitios de frontera con recientes cultivos ilegales debe intervenir las FFPPO armadas. El agricultor cocalero, puede Solucionar el problema del ciclo vicioso de la erradicación forzosa, lastimosamente siempre fue vapuleado, engañado y jugaron con sus expectativas, los políticos, (Ilámese Ollantas, Obregones, Malpartidas etc.) Las autoridades, sus dirigentes, y también por agitadores, y majaderos que agarran el dinero de sus olla común. Para evitar todo esto el verdadero agricultor cocalero agremiado debe tener estrategias, capacidad de negociación y concertación con proyectos alternativos propios, mente abierta y una defensa tenaz de sus intereses sin apetitos personales y debe pedir ante todos los estamentos del estado, Poder Ejecutivo, Congreso y Poder Judicial; la disolución del CORAH, por dignidad y justicia.
Los pasos a seguir, no son simples, requieren de una fuerte Voluntad a mediano plazo de querer superar todos los procesos, hasta llegar al CIDH para solicitar y obligar al estado peruano y al GEEUU el pago de indemnizaciones por la erradicación forzosa.

Escribe: Ing. Winger F. Rojas

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