Ese
día que Jorge Velásquez nos recibía en la oficina de la gerencia de la Sub
Región de Padre Abad para conversar sobre el problema con los funcionarios de
la UGEL, juntamente con nosotros ingresaba José Díaz, director de la Dreu. Al
percatarse Portocarrero de su ingreso, con voz arrogante y altisonante, le
dijo: -tú no, quédate afuera-. Sentí rabia ajena por esa forma de trato. José
Díaz, triste y avergonzado, salió obediente.
Una
vez toda la comitiva adentro, le recalcamos a don Jorge Velásquez lo que tantas otras veces se le
informó mediante cartas y memoriales, todo lo que se hacía en la Ugel y lo que se dejaba de hacer. En su turno, Portocarrero dijo: Ella ya está fuera,
estamos viendo los nombres para el cambio, a quién me sugieren ustedes para
director de la UGEL? Me han contado que hay un profesor muy bueno de Irazola.
No sabíamos quién era ese profesor tan bueno, ni por qué. Pero ahí a
Portocarrero le hemos sido claros y enfáticos, le dijimos que use las
herramientas legales para designar al nuevo director. Nunca recibió nuestra sugerencia y le trajo al
actual director. Conocido el cambio, un hablador de la radio, dijo que
cambiaban a moco por baba.
Es
cierto que para conocer los resultados
de una gestión hay que esperar un tiempo razonable, pero lo que no
podemos dejar de decir es que el designado de Portocarrero vino para seguir la
rutina de su antecesora. Inmediato a su ingreso, como para congraciarse con los
dirigentes, destituyó del cargo a los funcionarios faltosos y deficientes, nos
pasaba la información de desfalco y se le notaba con la intención de arreglar
aquello que estaba mal ahí. Sin embargo, pasado los días, se afinó a los
órdenes de su jefe para terminar el año, sin nada significativo a favor de la
educación de esta provincia.
Todos
los destituidos (Faltosos y deficientes), retornaron, hicieron las paces y están
terminando el año trabajando en equipo. Posteriormente, dijo que no era
desfalco y que el dinero está en
compras. Cuando le solicitamos la lista de las compras y las respectivas boletas,
prefirió no contestar.
Pese
a que la ley obliga a la UGEL pagar servicios básicos de los colegios y
escuelas, hizo que se vencieran los pagos, causando el recorte del fluido eléctrico
en todas las escuelas. De buena fe, conectamos
el servicio eléctrico desde la Casa del Maestro para el Fernando Carbajal, para
que las clases de la nocturna y para que la sala de cómputo sigan funcionando.
Sufrimos la penalidad de electro Ucayali por hacer esa conexión, que le
recargamos a responsabilidad de la UGEL, por ser los causantes reales de todo
este desorden. Que pague la UGEL esa penalidad, de ninguna manera, es un favor.
A
raíz de este problema y sumado el retraso de pago del mes anterior a los maestros,
nos llevó a protestar y viajar a Pucallpa para resolver el asunto en Desarrollo
Social. Ahí, el gerente Ludgardo se comprometió hacer un convenio con Electro
Ucayali para garantizar el servicio de fluido eléctrico hasta el mes de diciembre en todas las IE. No obstante, ayer
le recortaron nuevamente el servicio a la IE 64107 y eso sí se tiene que
arreglar con algo más que críticas.
Separando
siempre a los que sí trabajan, hay que dar cuenta que buena cantidad del los
trabajadores de la UGEL, tienen un trabajo no productivo y eso el director lo sabe.
Ya antes lo habíamos denunciado. Se tiene chofer pero no se tiene carro, se
tiene motorista pero no se tiene bote. Es la única Ugel sin una plataforma para
una comunicación adecuada y profesional de entidad a usuario, no hay un periódico
mural adecuadamente organizado y actualizado, no existe un sitio web para
facilitar al docente con la información.
Cuando
se da el caso, en persona, no escatimamos en comentarles a los responsables lo
que ahora hacemos público, como en varias oportunidades se les fue diciendo,
por ejemplo, la obligatoriedad de conformar un órgano indispensable en la UGEL,
el COPALE (el Copale Vigila). No les da la gana de conformarlo ni hacerlo
funcionar. Cumplir con la rendición de cuentas anualmente. No lo hacen.
No
tener al COPALE es como no tener al CONEI en las IE, al COPARE en las DRE o al Consejo Educativo Nacional en
el Ministerio de Educación. Y no rendir cuentas, lamentablemente solo es una
falta. Como es una falta, todo queda en las manos de su superior quien lo
justificará.
La
representación de las líneas principales de la UGEL, tanto de gestión pedagógica
e institucional, los jefes ensimismados en sus divagaciones, hasta ahora solo han servido
para quedarse sepultados con los papeles y no hacer su verdadero rol. Sobre
todo, la pedagógica, debieron reforzar a sus maestros, proyectarse en ser modelos en
didáctica, cultura, ciencia y don magisterial. No lo hicieron, ni lo harán.
El
nuevo gobierno que promete cambio, debe demostrarnos que tiene las agallas para
romper esa cadena, ese vicio, esa maldición. Es menester que la educación que es el medio para cultivar las
inteligencias esté representada adecuadamente. Para no solo centrarnos en el
cuestionamiento, sino también en propuestas y conforme ya le dijimos a don
Jorge, les decimos a los nuevos amos del poder: usen las herramientas legales,
usen la lógica y el buen sentido a favor de la educación de esta provincia.
Escribe: Bilsán Salazar Uzuriaga
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