Hemos
visitado a esta junta vecinal por varias oportunidades por la invitación de los
moradores para intermediar en la solución de sus problemas; sin embargo, hasta
el momento, no se ha logrado tal propósito por la viveza de un majadero.
Varios
son los motivos del conflicto de los moradores de esta Junta Vecinal, siendo
las más importantes la falta de transparencia de sus dirigentes de la asociación
15 de Agosto en el manejo de los recursos de las colaboraciones de sus asociados
y la poca sinceridad en la gestión de la reversión de tierras a sus moradores. Siendo
la realidad actual, la división de esta Junta Vecinal en dos asociaciones, el
cual les perjudica a ellos mismos.
En
una de las visitas anteriores, les planteamos a ambos grupos y ellos aceptaron una
conciliación, conducido por el Párroco de Aguaytía, el cual no se dio, por el
desinterés del majadero, quien tenía el deber de convocar a todos sus moradores
y nuestro compromiso era asistir con el Padre. Faltando un día para la
conciliación, visité a la junta para constatar la convocatoria y coordinar con
el majadero. Sin embargo, este se esfumó y a nadie había invitado.
Nuestro
último día de visita a esta junta fue el día de ayer. Llegamos cuando los
funcionarios de la Municipalidad les explicaban con respecto a la reversión de
tierras y les exhortaban también a unirse. Luego de discusiones, con nuestra
intermediación, se llega a un acuerdo a la propuesta clave para la unidad, dejar
sus cargos ambas dirigencias y la elección de una nueva, sin la inclusión a
ninguno de los salientes.
Acepta
el majadero y acepta la otra dirigencia y a nuestra conciencia ya le dábamos
por unida y consolidada a esta junta. Nos exigieron que antes de la elección se
constante que los votantes solo sean moradores reales. Nos pasamos como media
hora llamando a las dos listas para que solo ellos voten.
Cuando
estamos a punto de elegir a la nueva junta directiva, símbolo de la unidad, el
majadero se arrepiente de su decisión anterior, azuza a sus seguidores y arma
la trifulca para evitar la elección de la nueva junta directiva. Quedando esta junta vecinal, como siempre,
dividida y entre odios.
Se
le debe exhortar al majadero a autoevaluar sus actos como dirigente, que los
acuerdos se cumplen, que la sinceridad es realmente la medalla de los
verdaderos líderes; pero las otras mañoserías no son más que las semillas que
hacen brotar resentimientos que se debe evitar que maduren antes que sea tarde.
ESCRIBE: Prof. Bilsán Salazar
ESCRIBE: Prof. Bilsán Salazar
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